Servicio Integral de Mantenimiento Preventivo y Correctivo a
Sistemas de Elevadores y Ascensores


                     Limpieza de Sardineles
 

 Antes de iniciar, verificamos la acumulación de polvo y residuos. Durante el mantenimiento, realizamos una limpieza minuciosa de los sardineles, los rieles donde se deslizan las puertas. Este proceso elimina la suciedad que, con el tiempo, causa fricción y dificulta el movimiento. El resultado final son puertas que abren y cierran con una suavidad impecable, garantizando la seguridad y fluidez para cada usuario. Prevenimos atascos y el desgaste prematuro de los rodillos, lo que se traduce en menos fallas y mayor vida útil.

La limpieza de los sardineles asegura un bajo coeficiente de fricción, vital para el correcto funcionamiento de los operadores de puertas y la precisión de los fotocélulas de seguridad.

 
 
    
            Limpieza de Unidad Hidráulica
 
Unidad Hidráulica

El Corazón Eficiente del Sistema.

 

Comenzamos inspeccionando el estado general de la unidad. Durante el servicio, realizamos una limpieza exhaustiva de la unidad hidráulica, el componente esencial que controla el movimiento del elevador. Eliminar contaminantes y verificar fugas es crucial para su correcto funcionamiento. Esto nos permite asegurar una operación potente, suave y eficiente, alargando la vida útil del sistema y previniendo fallas por sobrecalentamiento o contaminación del fluido.
Una unidad hidráulica limpia evita la contaminación del fluido y asegura la precisión en la actuación de válvulas, fundamental para un control de velocidad y nivelación óptimos.

 

Limpieza y Lubricación de Motor

 

 

Motor Impecable

Potencia con Silencio Duradero.

 

Antes de la intervención, revisamos visualmente el motor. Durante el mantenimiento, realizamos una limpieza profunda y una lubricación precisa de todos sus componentes móviles. Este cuidado previene el sobrecalentamiento, reduce la fricción interna y minimiza el ruido. Como resultado, su ascensor opera con una potencia confiable y de forma silenciosa, prolongando significativamente la vida útil del motor y garantizando un rendimiento óptimo.

La lubricación adecuada de los rodamientos del motor minimiza la resistencia mecánica, lo que mejora la eficiencia energética y reduce la generación de calor, previniendo fallas prematuras.